En el mundo actual en el que vivimos la obesidad es una de las enfermedades más comunes y una de las que más problemas causa, pasando a veces por ser un problema estético de apenas unos kilitos de más, como el “no me entra este pantalón”, a mostrar una cara mucho más preocupante que es la de afectar seriamente a nuestra salud, disparándosenos el colesterol, los triglicéridos, problemas de huesos causadas por el sobrepeso y llegando por último a causar enfermedades verdaderamente importantes para nuestra salud como son los ataques cardíacos, que en muchos casos acaban siendo mortales.
Muchísima gente que tiene sobrepeso, entre las que me incluyo, hemos probado multitud de dietas “milagrosas” que prometían bajar de peso rápidamente, algunas con bastante sentido común, y otras digamos que no tanto.
Ni que decir tiene que a la hora de hacer dietas tenemos que tener sobre todo sentido común, ya que parece que debido a la desesperación de muchas personas que por más que hacen dietas de todo tipo nunca acaban perdiendo peso, hay mucha gente que pierde justo eso que es tan importante, el sentido común, y comienza a hacer cualquier dieta por absurda, insuficiente ó desequilibrada que sea por el mero hecho de perder esos kilos que nunca se van, y eso es un error fatal en el que nunca deberíamos caer.
Yo he llegado a pesar 100 kilos y mido 1.80 centímetros y os puedo garantizar que no sólo he perdido peso haciendo dieta, sino que he llegado a mi peso ideal (80 kilos) en un tiempo más que aceptable, y además sin pasar hambre y dándome mis caprichos todas las semanas , y lo más importante de todo: lo he hecho haciendo una dieta con todo el sentido común que yo creo que puede haber, ya que he podido comer de todo y no ha cambiado absolutamente mi ritmo de vida.
Esta dieta que he seguido me la enseñó una amiga que ha estado muchos años pasando por esas famosas dietas desequilibradas y que un buen día tuvo la suerte de descubrir la que para ella sería la “Dieta definitiva” y con la que pudo llegar sin problemas a su peso ideal.
Mi amiga se llama Rachel y ella es la culpable de que yo también haya llegado a mi peso ideal sin problemas y sin dietas “radicales”, y me gustaría ofreceros a todos los que tenéis sobrepeso y estáis cansados de fracasar en vuestro objetivo de adelgazar, una forma saludable y sencilla de poder conseguirlo.
Desde este link dieta definitiva para adelgazar podéis enlazar al blog de mi amiga Rachel, el cual ha comenzado hace muy poco tiempo y en el que cuenta paso a paso como llegar a adelgazar fácilmente y sin esfuerzos sobrehumanos.
Según me ha comentado hace unos días, debido a diferentes
circunstancias de la vida ella dejó la dieta y volvió a engordar, y ahora ha
creado su blog para empezar otra vez de cero y volver poco a poco a su peso
ideal, pero esta vez lo quiere compartir con todas las personas que estén
interesadas en seguirla con ella.
Te animo a intentarlo porque de verdad ¡MERECE LA PENA!.
Un saludo.