Si alguna vez te olvidaste una olla en el fuego y se
te quemó, hay un truco casero muy sencillo con el que conseguirás dejar la olla
como nueva:
Le echamos un chorrito de vinagre de manera que cubra
la parte quemada y la dejamos a fuego medio unos minutos para que la mancha de
quemado se reblandezca, después la quitamos del fuego, la vaciamos y la lavamos
con agua y jabón.
La olla quedará limpita y preparada para seguir
usándola.
En este vídeo explicativo puedes ver todos los pasos:
Me parece un truco muy bueno, yo la habría tirado, pensaba que cuando se quemaban las ollas ya no quedaba más que tirarla
ResponderEliminarGRACIAS
pobre y resulto muy bueno
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